La escuela de la vida

La escuela de la vida es uno de los libros educativos que ha escrito Laura Baldini basado en la vida y obra de María Montessori. Su verdadero nombre es Beate Maly. Nació en el año 1970 en Viena, Austria y trabajó como maestra de infantil.  En el año 2007 obtuvo una beca que la llevó a apartarse de la escuela durante un año y centrarse en la formación, en el trastorno del espectro autista y en la escritura.

Nos dice en el libro que María Montessori para cumplir sus sueños tanto en el ámbito profesional como personal transgredió sus límites y que le costó mucho enfrentarse día tras día para poder llegar a ser lo que fue. Era natural de Italia y una mujer feminista, con un comportamiento luchador pero a la vez nos comenta sus miedos y lo que le angustiaba aunque siempre los conseguía superar por su tenacidad. Cuándo dijo que quería ser médica su madre dejó de hablarle y cuándo le dijo que estaba embarazada no quiso saber nada del hijo. La madre no admitía ni toleraba deslices morales. Se preocupaba mucho por su reputación y porque no pusiera en peligro su carrera, ella quería que entrase en el círculo académico "Que la admiración venza la hostilidad le decía". Sus compañeros le hacían la vida imposible por su trabajo y estudio y siempre tenía que demostrar que era capaz de ser una buena profesional. A la vez era una mujer atractiva y demasiado exigente consigo misma y con los demás. Realizó descubrimientos que la neurociencia aceptó muchos años después y que se aplican hoy en día en educación. Su tesis suscitó mucho interés y esta abierta al público porque "para muchas mujeres era un ejemplo iluminador" y les iba abriendo camino.  La sala estaba llena en el acto de presentación de la misma y todos estaban interesados en lo que tenía que decir. Ella quería ignorar todos los comentarios negativos, las malas intenciones y a los que de forma maliciosa querian que se equivocara pero no lo conseguían, el corazón le latía deprisa y sudaba, se tensionaba. ¿Que sentido tenía luchar contra todo esto? se preguntaba cuándo en realidad todos estaban en contra de su estudio, trabajo, y por su buen hacer y el hecho de ser mujer pero tenía que superarlo. Logró superar indignaciones, humillaciones, trabas y dificultades obteniendo la máxima calificación aunque de no haberla obtenido tampoco le hubiera parecido el fin del mundo. Sí le supuso todo un privilegio poder contribuir a la salud tanto de hombres como de mujeres y niños. 

María Montessori veía a Italia avanzada pero decía que en el sur había muchas mujeres esclavas y sometidas a derechos de los hombres, y que de ser así se corre el peligro de que las mujeres no sean capaces de tomar decisiones sensatas. Afirmaba que los hombres no son más inteligentes que las mujeres, que desde el punto de vista intelectual son iguales y rinden lo mismo. Al comenzar a ejercer se encontró con problemáticas así que trató de investigar el tema de su tesis no sólo de forma teórica sino práctica. No sólo teoría fundamentada sino experimentada y ha profundizado más en el conocimiento. A la medicina sumó la psiquiatría y la pedagogía y sus anotaciones sobre las personas, especialmente los niños. Comenzó en una clínica psiquiátrica donde se dio cuenta que los niños no jugaban y estaban tristes, no oía ruidos ni voces alegres ni niños traviesos, vió que los niños no hacian nada y le comentaban que no jugaban porque eran deficientes, observó que sólo les atraía el pan y que al verlo se comportaban como animales. Ella se enfadó muchísimo porque los niños se comportaban como adultos y se preocupó de que recibieran juguetes y jugasen. Siempre defendió a los niños, su desarrollo cognitivo, su empoderamiento como salvación para la humanidad y quiso desarrollar sus sentidos, mejorar los espacios. Abrió nuevas vías docentes a la importancia de enseñar, de establecer relaciones, y de la concepción del tiempo histórico en las aulas. Sus amigos se quejaban de que tomara más en serío la vida profesional que la personal, de su ambición, como si estuviera sumida en un trance pero es que ella se preparó a conciencia para su trabajo y en su vida personal luchaba a la vez contra lo establecido pero parece ser que querian que se decidiera o por una vida u otra.

Era una mujer muy innovadora, jugaba con nuevas ideas, desarrollaba nuevos métodos y materiales y creía que nada tenía que ver con la debilidad mental de los niños sino que era el sistema educativo que era miserable y se cuidaba poco a los niños, que está atrasado desde el punto de vista técnico y económico. María Montessori hablaba de Italia y lo veía muy atrasado en comparación con Alemania y en relación al sistema decía que "se permite el lujo de dar por perdido el potencial intelectual porque los maestros no están dispuestos a ver más allá de sus narices" y respecto a la mujer el sistema no las creía capaces y que fuera posible que pudiesen ser esposas y científicas a la vez. 

La pedagoga obtuvo muy buenos resultados pero vale la pena profundizar en su vida, en su trabajo, y en el papel de los educadores y más en el de las mujeres y madres, se ve muy bien las trabas cuando se es mujer y madre, tanto para ellas como para sus hijos, aún hoy en día se está en la línea de que las mujeres tienen que velar por el bienestar de la familia. Era una mujer fuerte, segura de lo que hacía y segura de sus resultados, sabía los progresos obtenidos. Luchaba por una escuela dónde los niños se sintieran agusto y que se tenía que cuestionar el sistema educativo  y el trabajo tanto del hombre como el de la mujer en la familia siendo un trabajo de los dos. Ella fue a un congreso de pedagogia y la querían a ella, a la vez sintió miedo de que le envidiaran su éxito, ya que estaba consiguiendo fama. Se sintió muy castigada con el silencio, que la tratasen como sino existiera, o al menos no de igual trato. En cambio se conocía muy bien a si misma, sus fortalezas, sus debilidades, lo que pensaba y lo que sentía pero también era consciente de la existencia de profesores que siembran miedo, que creen que es mejor el silencio, que los callados son mejores y que no querían formar a librepensadores ni a artistas ni anarquistas sino solo a aquellos que son capaces de seguir reglas y de ceñirse a las mismas. Ella aqui se preguntaba que si estaría bien convertir el éxito profesional como el único objetivo de la vida. Se vio embarazada y en esos tiempos y dada la moralidad se vió obligada a dejar la carrera y sentía "que tanto trabajo para nada, se sentía culpable", de alguna manera sabía que si se casaba los méritos eran para el marido y que ella tenía que renunciar a su carrera y así misma, la daban a elegir o la carrera o la familia y ella no veía aquí una solución por que aún en el 2021 es complicada para la mujer ya que en la mayoria de los casos se ve condenada a trabajar a la sombra. Esto fue lo que la llevó a luchar por las desigualdades y las injusticias sociales, desde el punto de vista físico, intelectual, profesional y personal gozar de los mismos derechos, consideró que era su deber luchar contra las desigualdades sociales, le dolía el alma y se vió obligada a estudiar más e hizo pedagogía y psicología aplicada, centraba todo en el respeto, tratar con el mismo respeto y que todo el mundo recibiera el mismo respeto porque todos quieren saber y aprender y que el sistema educativo hiciese que en las escuelas imperase la alegría, el amor, el cariño.

Para finalizar comentar que bonito todo el libro, el titulo "La escuela de la vida" y que bien redactado por la autora y que bueno el pensamiento de María Montessori y su auténtica imagen. De alguna manera ella se sintió castigada, no podía relacionarse con sus compañeros, a la vez estar embarazada en esos tiempos y soltera en la sociedad que vivía no estaba permitido, enojó mucho a su familia que habian confiado siempre en su preparación y en su saber y aunque logró llegar a la cima pues lo hizo sola,  de alguna manera fue objeto de persecuciones y consideraba que no lo merecía pero sucumbió, se encontró con tanto que se quedó en soledad hasta cumplir sus sueños. No era una mujer rebelde era una mujer inteligente, luchadora, innovadora que tenia mucho que aportar y se dió cuenta de las trabas, de las trampas y de los problemas, defendía con pasión una formación sincronizada con las necesidades vitales de cada persona, establecer ese vínculo pudiendo ser así "La escuela de la vida" y sin tener que abandonar ni elegir entre la vida profesional y personal sabiendo valorar y respetar a las personas, el saber de cada una y el conocimiento.