El coronavirus y la escuela

Hoy os dejo una reflexión acerca del coronavirus y la escuela, de la naturaleza humana y los entresijos de los problemas, de lo complicado y de las decisiones que se toman. 

El coronavirus es realista y clásico. Es poco romántico, soñador y apasionado. Obliga a mucha disciplina, orden, limpieza, higiene, alimentación, ejercicio, a mucho trabajo. Altera los sentimientos. Cuando una situación es complicada de cambiar entonces nos cambiamos a nosotros mismos. Es aqui siempre donde aparece el miedo. En el caso de la pandemia aparece el miedo a la incertidumbre, a la falta de seguridad, a informaciones contradictorias, a la indolencia. Y es aquí donde de nuevo aparece la ética, que se dice que está en desuso, anticuada y caducada pero claro que una cosa es la ética de los principios, y otra la de la responsabilidad.

Surgen situaciones donde hay que tomar decisiones con resultados inciertos. El riesgo de la complejidad, de la incertidumbre que tiene que ver con el crecimiento y las restricciones. Entiendo que son situaciones excepcionales y que hacen tomar decisiones de lo que se quiere y seguro que aún queda mucho por hacer y muchas dosis de confianza  y de compromiso, de sentirse capaz e intentar hacer frente e ir conociendo el sistema inmunológico y el digestivo pero también nos recuerda lo vulnerables que somos. 

La palabra vulnerabilidad deriva del latin "vulnerabilis", compuesto por vulnus "herida" y abilis, posibilidad "posibilidad de herida". Se relaciona con debilidad, fragilidad, susceptibilidad, sensibilidad, impotencia, riesgo e igualmente con la percepción de la capacidad de un individuo, de una comunidad para enfrentarse a la inseguridad, a acontecimientos imprevistos, a situaciones en un momento determinado.

Según estudios sobre perfiles vulnerables las personas que sufren traumas tienen defensas más bajas y sufren más infecciones y en periodos de confinamiento este tipo de personas son mas indicadas a sufrir depresión, ansiedad, estrés u otro tipo de trastorno que en realidad se puede evitar y prevenir. 

La vulnerabilidad es el grado de susceptibilidad de las personas y se da en función de determinadas condiciones culturales, educativas, físicas, económicas, técnicas, ecológicas, sociales. Se utiliza también como respuesta ante estrategias y recursos untilizados por determinados grupos o personas. Ante esto se pueden diseñar posibles intervenciones para afrontar los efectos. Sin aparente motivo y ante una situación que se considera amenazante, la respuesta es desproporcionada, inadecuada, ineficaz, está infundada, y se da por impulso, porque ya sucedió otra vez, o por sospecha, no caer bien, o por miedo y sin razón que lo justifique, o se ve una necesidad. 

En una situación como la actual se nos dice que ya pasó ya que ha habido un número de pandemias a lo largo de la historia, y que hay que centrar el foco de atención en solucionarla, más que en buscar responsabilidades y causantes. Ante estas situaciones se sugiere siempre hacer simulacros para la preparación con sugerencias e indicaciones que se consideran de interés. Los simulacros tienen que servir para conocer mejor las responsabilidades, las funciones. Se consideran como una prueba de evaluación para alcanzar las condiciones necesarias.

La primera condición a proteger es la salud. Y hay que repensar la salud como un valor y en el contexto humano. Lo primero que se aprende de la pandemia es un aprendizaje de una cultura de salud y forjar medidas saludables, mejorando así no solo la vida propia sino la del entorno, y la calidad de vida y bienestar. Aqui igualmente se continua la vida pero de alguna forma mas limitada aunque a medida que pasa el tiempo las restricciones ya se van reduciendo, hay que cumplir con los indicadores que se van marcando en relación con las fases. 

La segunda condición es la de construir la vida, aqui ver la ligereza que se manifiesta en todos los aspectos y en la vida de las personas. Cada uno debe de construirse y construir su vida, desde las necesidades más básicas y hay que educarles para esto y es duro, no es fácil. La vida es un peso aunque te ofrece opciones de placer y de disfrute pero tampoco te deja obrar a la ligera porque sino todo se vuelve una carga.  La ligereza es como el impulso que puede ser bueno, quiere librarte de males, disfrutar, divertirse, vivir bien pero a la vez se crean otros problemas, tampoco ser deslenguado o no tener verguenza.  Luego están los incentivos, el esfuerzo y el trabajo de cada uno. Las propuestas y el enfoque de desarrollo porque además de lo social hay que centrarse en lo individual, en el trabajo y que genere motivación y bienestar. No es lo mismo no trabajar que trabajar, ni es lo mismo ser un trabajador con dedicación plena y honesta que un trabajador ocioso. Ni tampoco lo es ser un trabajador que un directivo. Ni un directivo que un alto mando.

La tercera condición es la experiencia aprendida que tiene que ver con la disciplina. Es algo serio y obliga a cumplir las normas de las fases, a cumplir instrucciones y aquí siempre hay trampas, atajos, trucos. Hay que saber interpretarlas y tratarlas, sino es un abuso. Como aprendizaje social está la diversidad.

La palabra diversidad se utiliza como pluralidad, conjunto, multiplicidad, diferencia e igualmente para interpretar las normas y dar normalidad. 

Muchas veces creemos en personas como dogmas, como verdad absoluta, en cambio podemos creerlo y sentir de forma muy distinta.  Es una gran preocupación todo esto. Son funcionamientos desiguales, esto pasa mucho en las profesiones, en el marketing, tienen como objeto algo pero en realidad no es verdad, es una parte solo de lo que significa o al menos no es verdad de forma global, depende de cada lugar, cada sitio. Por eso la ayuda, la seguridad, y validar las emociones. La libertad hay que darla desde que se nace e ir adaptando pero haciendo que funcione bien y no desadaptando y que se esté en constante alerta. Más preparados para resolver conflictos y para contemplar y vivir las situaciones como algo normal. Cada caso es diferente, no son las mismas causas, si puede existir una predisposición, vivencias, aprendizajes durante la biografía familiar y de la vida que hace que se manifiesten de una u otra forma. Cuando se presenta una reacción sin apenas motivo, espontánea es en contestación a algo, esto genera ya una respuesta ante esa situación y puede ser inadecuada,desagradable llevando posteriormente a un malestar, a una desmotivación. 

Ante esto se puede relativizar el problema y ver otras posibles vías de solución. A la vez la comunicación, los escritos, una vida saludable, practicar actividad física, espacio para el ocio, para el placer, mejorar el bienestar, la calidad de vida. Aprender a gestionarse de otra forma y hacer que el malestar vaya descendiendo hasta desaparecer. Hay respuestas muy tajantes, como indiscutibles, se expresan de una forma muy rígida y esto es un obstáculo, se pueden ver muy seguras y en cambio no tienen porque ser las mejores.

Es importante ser una persona optimista y positiva en la vida. Y pienso que es importante ser optimista porque no es que no se quiera ver lo negativo, pero es pensar de una forma menos violenta y agresiva, menos catastrófica, desarrollar una visión más integradora, inclusiva, empática. 

Entiendo que una persona negativa es menos empática, se pone peor en la visión del otro, enseguida busca otras formas incluso de reemplazar más que de arreglar la problemática, el conflicto, las necesidades y demandas, toleran peor las frustracciones, y tienden más a la bipolaridad, o bueno o malo. 

Los virus siempre desarrollan muchos mecanismos para alterar y así dejar de ser incluso un blanco, un punto central. Producen respuestas que asocian al fracaso, y pueden dañar. 

Entiendo que ante esto podemos elegir, tener otras opciones, cambiar pensamientos e igualmente formas de actuar pero ante todo conductas y respuestas para que no dañen ni permitan el fracaso y la inactividad. La observación es base en todo esto. Y con esfuerzo trabajar y saber lo que se busca. 

La mayoria de las personas realizan en su vida cambios bruscos y violentos, de pareja, de trabajo, etc. no son cambios graduales, y luego en el tiempo encaja mal esto, se suprime y se elimina la lucha y a la vez es un empezar de nuevo, terminar con todo. 

En el caso de ahora de la pandemia COVID 19 la respuesta actúa contra el virus, contra la infección. Inmunidad significa protección y puede ser de tipo natural que bloquea o evasiva que evita la entrada. Genera unas consecuencias, un aislamiento e igualmente necesita tiempo para digerir todo esto en aras de un aprendizaje lo más honesto posible. 

En relación con la escuela hay que tener precaución. La forma de comportarse para no dañar la autoestima,  ni mermar el carácter, ni causar un daño y a la vez ayudar para que no disminuya el rendimiento. Las características de la diversidad, de la exposición en grupo, las emociones, los sentimientos. Esto hay que trabajarlo en la escuela, en positivo y en negativo, de forma didáctica y pedagógica. La idea es funcionar las futuras generaciones, que capten lo que sucede y a la vez ser respetuosos, lo más respetuosos posible. Entiendo que la escuela tiene que ser respetuosa, transparente y honesta, una entrega fideligna y que no manipule los sentimientos. Es aquí donde se abre a los demás, se abre el corazón y el alma, se expone y se tiene que brindar la verdad. 

La escuela tiene que tener recursos y buenos, no se tiene que piratear o gastar el propio dinero el  profesional que ve esta carencia porque genera un malestar, una conducta de riesgo por eso las hay que erradicar y aqui es donde hay que garantizar estos medios y suplir estas necesidades. Tener la visión más realista y disciplinada para tener una buena organización saludable en todos los aspectos, que mejore las estructuras, las personas y los aspectos de su vida. Hay una visión como que el profesional tiene que tener dinero e invertirlo en su trabajo, en su empresa para que esta mejore. Es una visión de marketing y competitiva. La escuela no tiene que hacerse de una forma clandestina, ni secreta, dar brillo y talento es su misión, tiene que permitir la observación, la confrontación, la discrepancia, las cuestiones y resolverlas, ser reveladora, ayudar a una visión más empática y científica. El arma de la escuela es la Paz, entender las diferencias y reivindicarse. Es mi parecer que todo el mundo está de acuerdo con las causas pero es necesario tratar las formas, los métodos, los recursos y es aquí donde se comienza a hablar, despojarse de los prejuicios, de lo preconcebido negativo hacia algo o alguien. Tratar de entender y de comprender es lo más dificil. Otro tipo de audiencia. La escuela puede construirse como la vida y tiene mucho positivo que se hace muy bien, solo falta la posibilidad de adaptarla al 2020, y ver que en ella todos tenemos responsabilidad. A menudo surgen situaciones en las que hay que tomar decisiones y hay que saber exponer y estar abiertos a escuchar, a asumir compromisos y más aún cuando los resultados de cada elección posible son inciertos.