El discurso de apertura del curso

"Invertir en Educación y en Investigación es invertir en futuro" 

Con esta frase comenzaba el discurso de apertura del curso donde parecían concurrir todos los casos para explicitar así todas las necesidades de los otros y hacerles un gran homenaje. 

Eran grandes personas, fueras de serie, además de ser muy trabajadoras. Excelentes, no era severas ni exigentes, eran corrientes y molientes. Les gustaba mucho la clase, ver que se tiraba para adelante y se preocupaban por todo el alumnado. Se hicieron a sí mismas pues tenían corazones nobles. Incapaces de castigar ya que tenian una gran observación y paciencia. Eran de esas personas que solo puedes decir cosas buenas y que ademas tienes que añadir que son gente comprometida, de gran responsabilidad y con una gran personalidad, carisma y liderazgo. Dignas de admiración. Por las noches estudiaban. Preparaban sus clases y madrugaban. Gente en acción. Les gustaba mucho el teatro, hacer obras, estudiarlas y representarlas. Los conocidos se asombraban ya que enseñaban muy bien. 

En cambio los trataron como ¿Seres vulgares? ¿Relegados? ¿Destituidos por las ideas? ¿Incapacitados para desempeñar cargos? ¿Les impedían opinar? ¿Los desautorizaban como personas de confianza?

Obviamente, verse así es sentirse enemistado con el mundo y no entender lo que sucede. Es sentirse invalidado y ya no querer dialogar. La maldad, las trampas, las miradas, las voces, querían hundirlos y ante eso no hay mejor cosa que la indiferencia porque hay camino en las sombras. Quizás almas de artista, mundos interiores diferentes así que si rehuyen, prohíben, rechazan la mayoría de las veces es más por envidia que por miedo o temor.

Queda intentar rastrear muchos mas casos de ese espíritu inagotable y así hablar en nombre de los que no quieren hablar, ni quieren dialogar ni perdonar o no pueden hacerlo pero no cabe duda que cada uno de ellos es un gran foco de cultura, de orden, de conciencia, de identidad con un conjunto de rasgos y de circunstancias únicas e irrepetibles y que con el coraje necesario avivan sentimientos,  provocan entusiasmos en todas esas personas apasionadas que quieren renovar, que quieren el progreso. 

El dolor seguro que se siente como propio pero endurece,  hace fuerte aunque se puede poner nombre, cara y ojos. La historia de cada uno es la historia de todos. Es una historia colectiva. En sentido amplio son las personas las que representan la época, el tiempo, la luz, y son de esas figuras donde se tienen puestas las esperanzas por su gran entrega. Merece la pena el hecho de continuar, de conocer sus historias y aunque han sufrido daños, enemistades, particularidades cada historia es insuperable y de un gran optimismo y generosidad.

"Cuando hay ganas todo el mundo puede luchar y mejorar sus capacidades"

" Sin estudio y trabajo, sin aplicación y sin constancia, no se inventa nada ni progresa la ciencia"

"No eran como otros, un mero vehículo de los libros de texto; su enseñanza era personal y ellos mismos la fuente de ella"

"Hacia su trabajo bien y era remunerado por ello pero la cuestión comienza por los que tenían el poder, por los que fueron desplazados. Estaban en una situación de pérdida de poder y no iban aceptarlo. 

"Los infantes y los jóvenes siempre son una esperanza para el mundo"