viernes, 12 de agosto de 2016

Persona


Persona es el primer volumen de la trilogía “Los rostros de Victoria Bergman”. El segundo es Trauma y el tercero se titula Catarsis. Entrelazan casos, historias de suspense con emociones muy fuertes ya que se trata de novela negra.  He elegido frases sueltas y con ello hilado una narración sobre pensamientos, sentimientos que aparecen en la primera historia que en realidad luego no tiene nada que ver con el resumen del libro.

Necesitaba estar sola, con su silencio. Un paseo, sin pensar en su trabajo ni en sus finanzas. Justo dejar vagar un poco sus pensamientos un poco, relajarse. ¿Acaso no tienes que amasar los recuerdos?. ¿Consolarte a ti misma?. No se lamentaba de sus inicios ni de la monotonía de sus labores. Se esforzó en parecer alegre, a pesar del estrés y de la fatiga. En muchos aspectos se hallaba en una situación de igualdad. Compartían tareas domésticas, lavar la ropa, pasar aspirador, cocinar por turnos, etc.
Se haría un nombre donde el dinero correría a raudales y por fin podría diferenciar entre ir por el mal camino y hacer el mal o ir por el buen camino y hacerse una persona de bien. ¿Cuánto sufrimiento puede infligir un ser humano a los demás antes de dejar de ser humano el mismo y convertirse en un monstruo?
Las palabras en lugar de la acción. Las palabras a base de confianza. Pero para tener confianza hay que sentirse reconocida. Este es el mayor punto flaco en todas las relaciones humanas. El individualismo es una verdadera religión. En un mundo lleno de sufrimiento la gente rechaza la confianza y la lealtad. Y ¿Qué se hace? Huir en vez de poner las cartas boca arriba. La falta de empatía, el egoísmo, es todo un desastre, etc.  Cuando hay incertidumbre, desconfianza, celos, etc. no se piensa de manera lógica. Hombre o mujer no tiene importancia. Lo que cuentan son las personas. En el fondo hay que tomarse los males con paciencia. Es una víctima porque no tuvo ni idea de lo que hizo. Sus intenciones eran puras. Sin ningún sentimiento de venganza, envidia o celos.
¿Se puede ser malo sin que uno sienta culpabilidad alguna?
¿El sentimiento de culpabilidad es una condición del mal?
¿Se puede ser violento hacía aquello que va contra su voluntad o cuestiona su ideología, su agresividad?
¿Vivía con la ilusión de que la perfección era un estado permanente que no exigía mantenimiento alguno?
¿Un mundo de fachada? ¿Había comprendido las reglas del juego?
La huida. La huida, ante todo, piensa. El instinto de conservación va de la mano del instinto de destrucción.
Los recuerdos se adueñan de ella. Le queman la garganta. Todo le duele. No está preparada para esta avalancha. Comprende que en aquel entonces debería haber sido más sensible, pero sabe que entonces prefería aceptar las cosas como eran.¡ Ir de humillación en humillación!
Murmura sola. Cómo si la voz dentro de la cabeza rezumbara a través de sus labios cerrados.
Se lleva las manos a los oídos para tratar de no oír más esa risa de locura, lo que creía que era la felicidad.
Aceptó que la vida no es siempre como una se imagina. Sin tristeza. Sólo con indiferencia.
Este silencio era una condición necesaria. Quien calla otorga querido amigo. Callarse es una buena arma.
Hecho gala de la capacidad de iniciativa pues puede actuar sin esperar órdenes
Un miedo incontrolable la invade. Esta situación es nueva. De golpe suceden acontecimientos que no están bajo su control. Que se escapan a su poder. Sin saber por qué. Tiene muchas cosas de las que desahogarse. Experiencias en su memoria. Las cosas ocurren, se sienten y se convierten en un recuerdo que con el paso del tiempo forman un todo. Su vida formada por los acontecimientos. Busca nuevas posibilidades de desarrollar su personalidad. No una alternativa sino un compromiso, sin reservas, una creación nueva.
La vida como una sucesión de instantes, sumados uno a lado del otro, diferente de los demás, una toma de conciencia. 
¿Qué es la debilidad? ¿Quién es débil? Dar vueltas a ideas y pensamientos para unir hilos, compartir entusiasmos, ideas, aspectos de los casos, consideraciones prácticas. Tener tiempo para vivir. Crear su universo mental. No hay que estar siempre quejándose sin vivir. “Vive y no te quejes”. Nuestra sociedad se basa en una moral construida. Es una forma de autodefensa.

Texto basado en el libro de “Persona. Los rostros de Victoria Bergman” de Erik Axl Sund.

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