Docente es ser, estar y parecer

Os dejo un texto que escribí y publiqué hace tiempo dónde quise dar una definición más amplia de la que aparece en uno de los primeros artículos de este blog "Ser maestro" del significado de la docencia por entender que no solo es ser sino también estar y parecer. 

Docente es ser, estar y parecer

Ser significa una actitud, querer sin más, pasar inadvertido, encontrar numerosas razones para ilusionarte cuando crees que ya no merece la pena. Superar momentos difíciles conjugando la severidad con la ternura y potenciando la sensibilidad. Dar, comunicar, reír y llorar. Entender los valores humanos mirando al alumnado y hacerte preguntas y buscar respuestas e interpretar respuestas y hacerte preguntas. Reconocer que los alumnos tienen que tener mucha paciencia con nosotros y que nosotros como maestros teníamos que cultivar la absoluta paciencia, el sentido del humor y la sonrisa. 

Es una combinación de capacidad de amar, de perfección intelectual, ética y moral, sin plantearte el tiempo, las compensaciones, ni tu misma vida.

Estar significa encontrarse. tomar decisiones importantes cuando haces de padre/madre, pedagogo, psicólogo, educador, cuidador, carpintero, secretario.... y darte cuenta la relevancia de tener  una capacitación elevada, un conocimiento especializado. 

Recopilar información y analizarla, elaborar programas, proyectos, protocolos para reinsertar la atención individual/social  y la formación educativa del profesorado/alumnado. 

Sincerarse y asumir que no es tarea fácil, que no eres un militar pero tampoco un colega de los alumnos. Dejarte de complejos y conocerte a ti mismo. Enfrentar los problemas sin que te produzca frustración el presente ni ansiedad el futuro. 

Disponer de herramientas adecuadas para actuar sobre los conflictos con responsabilidad solidaria.

Parecer significa asemejar, opinar, dejarse ver, tomar consejo, empatía. Ser consciente que en ocasiones nos enfrentamos a conflictos y situaciones que requieren periodos de adaptación para vencer altibajos en el quehacer cotidiano. En las organizaciones los problemas personales y profesionales de cada una de las personas que la integran pueden ser interminables. Ante los conflictos tenemos que estar preparados para resolver nuestras dificultades y tener buena disposición para descubrir nuestras posibilidades y optimizar así nuestro potencial.

Para el alumnado/familias/compañeros/sociedad en general es importante alcanzar la mejor asignación de recursos posibles en la resolución de problemas. Unas palabras mal entendidas, unos gestos fuera de contexto pueden causar reacciones inesperadas y reflectarse en el trabajo y en el trato. En ocasiones, es necesario aguantar el tipo y poner buena cara para comprender el problema de la convivencia, de la comunidad, de la sociedad misma.

Constatar las diferencias e iniquidades sociales, políticas, culturales, económicas y reconocer que hay que asumir muchos roles, buscar muchas y variadas alternativas para no sentirnos agredidos. Luchar para que ello no nos afecte y aprender a protegernos no es camino fácil. Si elegimos aceptar, conquistar los retos que nos presenta la vida, encarar las adversidades, estamos avanzando en gran medida hacía la conquista de la educación y de uno mismo.

Docente es una entrega generosa hacía los demás, sin reservas.