miércoles, 18 de octubre de 2017

Karen Armstrong


Karen Armstrong, escritora británica especializada en religión comparada y galardonada con el premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2017 ha realizado un debate en la Biblioteca de humanidades de la Universidad de Oviedo.  En sus respuestas afirmó que las religiones son una forma de arte y que para entenderlas hay que mirar desde el día a día. Para ella "la creencia" no significa aceptar una propuesta sino que es "confianza, lealtad" y que la fé más que aceptar un credo se trata de "un compromiso" de "elevar la razón".  Habló de la Compasión " No tratar a los demás de forma distinta de como te tratan a tí".  Nos ha definido lo que es "Amor" como algo que está desvirtuado. Amar significa protegerse, ser aliados, sentir cariño. Para ella la religión pertenece al mismo terreno que el arte, como un pensamiento que busca respuestas y lo une al cuerpo, a los sentimientos, a las emociones, es una entrega, el hombre ha avanzado en un sistema de igualdades, la religión es frágil por lo que no puede convertirse en ciencia. El arte, la poesía, las esculturas todo ello hace que miremos el ser humano.
A la idea de compasión añadió la idea de dar, aunque es dificil dar a otro cuando se tiene poco nos comentó y definió la palabra "tolerancia" como soportar algo, aguantar algo, es el lenguaje del vencedor. Nos dijo que religión y política son dos identidades distintas y que tienen que estar así separadas. Uno de sus proyectos está basado en "La ciudad compasiva". Acerca de las Universidades aseguró que tienen que desempeñar bien su papel pues están educando a los jóvenes, al futuro y se pueden hacer muchas cosas buenas. Ella no es académica pues nos hizo saber que fue rechazada por la Universidad pero cree que fue lo mejor que le pudo pasar ya que solo hubiera enseñado la lengua inglesa y cree que ha aprovechado mucho más la vida. Que le gusta mucho lo que hace y que entiende que hay que ayudar a los estudiantes a conocer otras culturas y también a conocerse entre ellos. 
Nos advirtió que queremos ser felices pero sufrimos. Por eso hay que disfrutar de los privilegios que tenemos pero a la vez mantener la mente abierta para el dolor con los demás. Que el mundo hasta hace muy poco era de hombres y para hombres y que su madre le decía que tenía que aceptarlo así. Es un hecho que la religión es patriarcal. Para finalizar habló de la Regla de Oro y que hay que utilizarla y nos guste o no las personas tienen que ser tratadas como queremos que nos traten. Termina con una llamada a la compasión y a estar atentos a los desastres de los demás pues son la sangre de nuestros hermanos que nos gritan desde la tierra.
El acto concluye dando las gracias a Karen Armstrong por brindarnos la oportunidad de poder asistir a escuchar estas palabras de sabiduría y permitirnos compartir este tiempo tan valioso y de gran valor. 

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