El valor de nuestro trabajo hay que reconocerlo y que mejor que hoy “Dia Internacional de los Trabajadores o Primero de Mayo".
Si tuviera que dar las gracias a todas aquellas personas
que me ayudaron en mí caminar seguro que tendría que realizar una lista
importante, la misma quizás si tuviera que reconocer a los que me han
perjudicado. A la vez tenía que dar las gracias, pues si bien hoy en día no
siento la misma satisfacción profesional por mi maravilloso trabajo si la
siento personal por mi implicación en el mismo. Lo que si tengo que reconocer a
todos y todas de cada una de las personas que se han cruzado en mi camino y a
aquellas que se han mantenido a mi lado es el hermoso hallazgo que he
encontrado que hace que reviva en mí la ilusión y el desafío por este mundillo de
la escuela, de la investigación, de las ciencias, de la educación, campo que
siempre me atrajo y que siempre me gustó, fruto del cual encontré mi desarrollo
personal, profesional y social.
Un día soñé fruto de mí inconformismo que podía cambiar y
mejorar. Siempre estuve contenta con mi trabajo y felizmente me plantee metas,
objetivos. Quizás cuando una persona llega a la cumbre tiene dudas y se plantea
que quizás son objetivos muy altos pues es muy difícil y sobre todo en
educación reconocer las acciones, si son buenas, justas, éticas y esto siempre
provoca una inquietud, una preocupación. Por eso hay que echar una mirada al
malestar docente. Dicen que somos privilegiados porque gozamos de ciertas
ventajas, disponemos de ciertos honores pero hay que ver las condiciones y los condicionantes que nos rodea.
“Feliz día del trabajo”
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