lunes, 22 de febrero de 2021

El Don de Imaginar las Matemáticas

Qué título más bonito "El Don de Imaginar las Matemáticas" de Agalir Ediciones Solidarias de la autora Sol Antolín Herrero. Solamente el título y la portada ya inspiran leerlo. La autora es licenciada en Filología Hispánica y es profesora de la UNED. Leer y escribir son sus pasiones. Ha colaborado en distintos trabajos de investigación, con la Revista Puente y ha publicado libros y artículos pedagógicos.

La escritora nos dice que "Escribir le permite indagar en una realidad que le cuesta comprender". Es algo terapéutico. Entiendo que es como la cura, como dice la canción de Franco Battiato, para superar esa corriente gravitacional, el espacio y la luz, comprender los problemas que se encuentran en el camino, los fracasos, las injusticias, los engaños, las obsesiones, las penas, los delirios, y curarse de todo. Ella recogía todo lo que oía, lo que veía, y le parecía extraño y lo anotaba, lo que no significaba que lo dejara todo procesado. Una vez que lo escribía la llevaba a otras cosas, y a contarlo y a otras reflexiones, todo ello la hacía pensar.

El libro aborda la historia de Sofía Kowalevskaya, una matemática excepcional y de un gran talento. Esta científica creía que la transformación de la realidad se hace a través de la ciencia. Era apasionada de las matemáticas y de la literatura. Fue la primera mujer en obtener un doctorado en matemáticas y la primera en formar parte de un consejo escolar de una revista científica. Dice que su padre le frenó mucho los estudios pues le horrorizaban "las mujeres sabias".

Os dejo un texto del libro que me ha llamado mucho la atención

"Estoy cansada, triste, extenuada, tanto trabajo para lograr un doctorado... he sido perseverante... me atormenta pensar que haya sido demasiado ambiciosa, que me guste el éxito..., quizás la pretensión de hacer lo que no estaba previsto para mí me ha traído hasta aquí...los éxitos me gustan  claro, pero no por egoísmo..., me gusta investigar, disfruto con ello, y dar al mundo el resultado, quiero que todos se beneficien de ello... me gusta...lo necesito...o debería decir lo necesitaba...Que diferente es todo para mí ahora. Mi mundo reducido a mi misma...un mundo creado por mi...No buscada...No elegida...

La protagonista fue pionera, se había doctorado, obtuvo la distinción de cum laude, y de repente se derrumbó porque no la hizo ascender ni trabajar en la universidad. El libro nos explica cómo se fue sucediendo el recorrido, las opciones que tenía, su trayectoria vital. Nos da a conocer las opciones desde el pasado, los obstáculos, las barreras y cómo se fue incorporando. 

La experiencia de esta mujer tiene un sentido para nuestra propia experiencia. Es injusto verse con formación, con conocimiento, experta y a la vez inutilizada. Es importante saber que en esos tiempos se la dejaba ser maestra, una profesión más femenina y de imagen y posición social aunque de un estatus más subordinado, más unido al cuidado, a la educación, al saber de escuela que al conocimiento científico e investigativo universitario.

Trabajar en el progreso y en la ciencia, el deseo de ser universitaria, de doctorarse, sentir esa atracción, esa sana ambición de mejorar, de progresar, de ascender, de hacer lo que realmente le gustaba y sentir menospreciada su capacidad, quizás su perseverancia, trabajo y esfuerzo es duro. Es sentir "malestar emocional", ese tipo de sufrimiento dónde se ven desgastadas las capacidades y que no permiten conseguir las metas y desenvolverse en los contextos cotidianos, sociales y laborales como tiene que ser.

Hay muchas mujeres en la historia que han contribuído con sus teorías a la mejora del sistema y en cambio se les ha visto mermadas sus funciones, su sueldo, y han continuado por su interés trabajando e investigando. Es importante el reconocimiento y también la remuneración. 

Acerca de este tema hay mucho trabajo hecho pero aún queda mucho por hacer y aún desde la sombra las mujeres siempre han contribuido al saber científico. Realmente se visibiliza todas aquellas que han llegado o se les ha permitido llegar al éxito, es decir, hoy en día, como en su momento la protagonista hay mujeres excluidas que llegaron a ser relevantes en la historia y ahora tienen voz.

Existe otra realidad que también se percibe y que va unida a la imagen de la mujer, a su interés por los estudios, por una formación alta, por doctorarse y a las etiquetas. Problemas que se quieren justificar como la histeria, la depresión u otro tipo de trastorno y así manchar la imagen y la relevancia. Es importante conocer lo humano y que prevalezca el interés de seguir para el bien tan preciado de una misma y su salud. Eso la mujer ya lo sabe, ya conoce la desigualdad añadida que tiene por ser mujer, por la reproducción y todo lo complejo que supone y aún así se quiere convertir en una desigualdad mayor y digamos que enfermiza. Con la reproducción ya se pierde parte de la identidad,  hay aquí ya un debilitamiento y condena a la desigualdad y se quieren convertir los malestares de desigualdad en malestares mentales cuando son sufrimientos emocionales, no es aquí necesario un diagnóstico médico sino respuestas. No es necesario medicalizar estas reacciones, sino comprenderlas. Implica entender lo que sucede, el caso. Aliviar el sufrimiento es incrementar las posibilidades de ayuda, más cuándo son problemas de las sociedades que se demanda un trato más considerado. Aquí la mujer se ve obligada a discriminarse sola y a seguir su camino, obviamente lo esencial es que el desarrollo de la vida se lleve en paz y feliz y hay que liberarse de este tipo de sufrimiento, de las afecciones que tienen que ver con los afectos, con el riesgo de enfermar siendo la salud la característica humana más importante. Entiendo aquí que la mujer es a la vez el instrumento pedagógico. 

Para finalizar os dejo una frase y comentar que el texto nos añade que las mujeres lucharon todas juntas porque todas tenían el mismo objetivo que era el acceso a la Educación y a una profesión. La protagonista era una mujer inteligente, con una base fundamentada, era científica y ante este gran problema que venía de mucho atrás y gracias a la lucha consiguió ser la primera mujer en Rusia que trabajó como profesora en la Universidad. 

"Saborear el reconocimiento y poner en práctica lo aprendido es ser un poco más feliz"

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