La escuela más feliz y el COVID 19

" No existen atajos para conseguir la felicidad" 

Martín Seligman

El libro "La escuela más feliz" habla sobre el sistema educativo y la reflexión. Está escrito por Rosa Jové, psicóloga y especializada en psicología clínica, colaboradora en muchos programas de salud, mujer, madre de dos niños, trabajadora y luchadora incansable. Para ella "El tiempo de familia es tiempo de familia" y el "tiempo de colegio es tiempo de colegio". Las escuelas no pueden organizar ni meterse en la vida de las familias. Nos dice que si la familia tiene tareas que hacer no puede plantear la escuela que las de ella son previas y más importantes. Esto es lo que la lleva a estar en contra de los deberes. Entiende que el feminismo es ser mujeres en mayúsculas, en los aspectos que cada una quiera, si se quiere la mujer o no casar, si se quiere o no tener hijos, si se quiere o no trabajar, que ella decida, sea lo que quiera ser y se empodere. En un mundo compartido, ante una realidad social existente ser la mujer que se quiere ser y sentirse autónoma y segura. Hoy, me gustaría dedicar este post a una mujer comprometida y que nos ha dejado este mes, el día 3 de junio, a Begoña Sánchez, presidenta de la asociación feminista de Asturias "Clara Campoamor", mujer incansable y luchadora contra todo tipo de injusticias.

El libro constata que no todas las asignaturas que se imparten en la escuela son iguales y en cambio seguimos como hace 50 años con asignaturas de primera y de segunda, con profesorado de primera y de segunda , las marías siguen siendo las mismas y esto es una gran injusticia.  Y no hace felices ni al alumnado ni al profesorado. Sigue enfocada más en las debilidades de cada uno que en las fortalezas y no identifica el carácter que es de suma importancia para la vida y para mejorar la calidad. La escuela oculta esto, es lo invisible, lo que no se ve y está en juego la autoestima del alumnado y del profesorado. 

Ken Robinson explicaba que la escuela no enseñaba a bailar igual que enseña matemáticas ni un idioma, en cambio el baile es un idioma internacional aparte que une culturas y refuerza la personalidad. Si se elije el baile que mejor representa a uno mismo sirve para expresar emociones y sentimientos, sacar hacia fuera sin tener la sensación de guardarse cosas para sí. Cuando se baila se pone todo el sentido y todo fluye al son de la música. Conexión mente, cuerpo, alma y mejora la salud, hace visible lo invisible. La escuela en cambio invierte estos valores,  le da un planteamiento transgresor, como para mentes poco inteligentes, degradando su importancia y en cambio es arte, pasión, emoción. Cada época tiene su baile y su cultura y cada persona igualmente y forma parte de ella, de su ser, de su salud. 

Somos humanos y podemos aprender a actuar en nosotros mismos, a motivarnos, a manejar el estrés, a equilibrar nuestras vidas. Parte del alumnado y del profesorado pasa por la escuela sin poder expresarse ni descubrir su arte, sin conocerse a sí mismo. Aún se trabaja en compartimentos estancos y en cambio la vida ha avanzado, los cubos de rubik son tridimensionales, otros mundos, la cocina de hoy y la moda, la sostenibilidad, tiene que tener su espacio en la escuela.

El estudio de las fortalezas es de suma importancia para fortalecer las relaciones, la confianza. Según la teoría de Martín Seligman la psicologia no hay que enfocarla solo en las debilidades humanas sino en el estudio de las fortalezas, de la felicidad de una forma individual, grupal y socialmente. Se pueden identificar las fortalezas del carácter. En el trabajo conocer las fortalezas es de suma importancia para lograr la mejor calidad, vincular y unir a la gente.

Las fortalezas de carácter son las partes positivas que afectan a la forma de pensar, de sentir, de actuar y de comportarse. Son las claves para desarrollar lo mejor de cada uno. Difieren de los puntos fuertes porque las fortalezas reflejan el yo real, lo profundo de la persona. Los puntos fuertes son las habilidades, los intereses, los talentos, los recursos. Cuando acosan o atacan a alguien es el carácter, la fortaleza lo que está siendo atacado, la reputación de la persona, la honestidad, la integridad. Se atacan las cualidades de la persona, lo positivo que hay en esa profundidad. Las fortalezas del carácter es lo que hace que cada humano sea único e irrepetible, tenga su distintivo, su identidad, su idiosincrasia, se sienta bien. 

El estrés, la depresión, el bulling, el acoso, la ansiedad, la baja autoestima se puede salvar con un conocimiento mejor de si mismo y una educación más comprensiva. Los proyectos y programas educativos tienen que tener también estas metas vitales del alumnado, que tengan en cuenta la salud, el bienestar, el ajuste social, el rendimiento. Tratar de prevenir conductas, estados tóxicos y nocivos para las personas y la sociedad, y crear las condiciones óptimas que faciliten la salud, el bienestar, el éxito, la convivencia, la participación e integración social. Las fortalezas son el paraguas de la persona, la protección. Entre ellas cabe destacar el amor por el saber, la humildad intelectual y la valentía intelectual.

El libro habla del papel de la escuela y que la escuela fomenta las clases, los que tienen fortalezas de primera clase y los que las tienen de segunda y pone ejemplos como a Rafa Nadal. Bill Gates, Madonna por su preferencia por la educación fisica, la informática y la música, las artes, las tecnologias son necesarias y tampoco tenemos que ponerlas ni plantearlas como clase B y que la clase A sea las de los estudios científicos, es muy injusto, se plantean aqui las clases, el lugar donde se encuentran las personas dentro de la sociedad tanto a nivel personal como de estudios y social. Ya está aquí la escalera larga y que no a todos cuesta lo mismo subir sino que va a depender de las circunstancias porque muchos con este tipo de fortalezas se piensa ya desde abajo que son ciudadanos de segunda cuando en realidad "la escuela feliz" conjuga el bienestar y la salud con los aprendizajes, 

El COVID 19 trae consigo por una parte esto, escuelas mas humanas, más limpias y frescas, más saludables y atractivas pero quizás las emociones y fortalezas siguen estando enmascaradas, el proceso de enseñanza y aprendizaje es algo muy complejo, es evidente que se pretenda reestructurar desde la atención plena y las fortalezas. Por otra están los afectos, la comprensión, el cariño. Las mascarillas llevan consigo la ausencia de sonrisa, de contacto, de cercanía y quizás tensiones, estrés y ansiedades que hay que resolver. El distanciamiento es complicado porque el  amor, sentirse queridos, es fundamental, es parte de la calidad. La expresión corporal de las emociones, expresar el sentir, ese calor humano de poder expresarlo. La frialdad de no toques, límpiate, aséate, distanciamiento, no te acerques al otro, es excluyente, se vuelve a lo ficticio, a lo aparente, a esas muestras de cordialidad como la escuela de hace 50 años que no pone remedio a las limitaciones sino que las aumenta. 

La escuela tiene aún mucho camino por recorrer porque aún tiene vacios. Y ahora, el hoy, pensar que las escuelas están cerradas es muy duro y cruel. Es aquí donde se viven las luces y las sombras en el ámbito de la educación, de la escuela, de la vida. Hay que adaptarla a las nuevas generaciones, darle nuevas herramientas y que se pueda progresar humanamente. La educación necesita inversión, nuevos materiales y que se posibiliten espacios y el profesorado necesita apoyo. Replantear el sentido y el propósito que tiene la escuela.  Seguimos haciendo las mismas preguntas que el siglo pasado. ¿Que escuela se quiere? ¿Que tipos de aprendizajes? ¿Y la evaluación y validación ? ¿Que se dice al respecto? 

Para finalizar comentar que todos formamos parte de la sociedad y además de individuos somos ciudadanos del mundo que sigue y sigue dando vueltas. La escuela on line puede forjar conocimientos, instruir saberes pero tiene las limitaciones de las fortalezas, de lo más complejo, de la evolución. La cultura de salud, los nuevos aprendizajes hay que preservarlos, fortalecerlos como prolongación de la vida que continua, es decir, el ejercicio, la alimentación, la higiene, la ropa, el descanso y el disfrute, las normas, las tensiones y el saber nos acompaña siempre y la escuela es la que actualiza y te mantiene al día. Es dificil explicar el significado de la escuela, de bailar los sentimientos, de querer sacar, aflorar no solo los problemas sino lo mejor de uno mismo, de mejorar, de capturar el ritmo de la vida, de avanzar, es una necesidad no solo social sino del ser humano, tiene su sentido, expresar los sentimientos, comunicarlos, las emociones, conocer las costumbres y saberes ancestrales, de los antepasados y poder equilibrarlo todo con el hoy, con el día a día y continuar así la vida presente. Hacerlo mejor está en todos y a la vez en cada uno solo hay que querer, tener buenas intenciones y es aquí donde está la satisfacción, los beneficios, los logros, el reconocimiento, es entrar en el propio mundo y poder vivir la propia vida, la propia experiencia. Son las dos caras de la moneda, por una parte la de apoyo, de socialización y por otra la actitudinal, los lazos y lo que representa, ayudar a las personas a reafirmarse, oportunidad para aprender y disfrutar de la infancia y a conseguir su destino con la esperanza de un futuro feliz.