El día del medio ambiente y Lorca

Hoy se celebra el día mundial del Medio Ambiente bajo el lema "Alza tu voz, no el nivel del mar", recordamos también a Lorca nacido un cinco de junio. Son días que inspiran a las personas a hacer lo que puedan, a recordar, una oportunidad para sugerir ideas creadoras y para suscitar algún sentimiento.

En educación podemos ayudar a todos los niveles con los aportes de estudios acerca del cuidado del medio ambiente para satisfacer las necesidades básicas de la humanidad, erradicar la pobreza, mecanismos de reciclaje para no agotar recursos, integrar la economía en la toma de decisiones, resolver problemas sobre la biodiversidad, la lucha contra el cambio climático, la protección de los bosques, el desarrollo sostenible pero esto no es suficiente sino entendemos que tenemos que mejorar nuestras acciones. 

Es importante reciclar, reducir y reutilizar por eso la utilización de los contenedores. Hacer menos ruido, apagar luces, aprender a cuidar la salud y tratar de pensar de forma diferente. Todo está en abrir los ojos e ir tomando conciencia sin provocaciones ni causar daño. Un compromiso hacía un modelo social más responsable.

La educación es una herramienta básica para entender nuestras acciones que tienen un impacto directo en nuestro entorno. Es cierto que queremos una forma de progreso económico, está demostrado que la competencia atroz y las zancadillas no conducen a favorecer una sana convivencia ni el respeto a las personas.

Un progreso sostenido en el tiempo implica una buena organización del trabajo humano, en armonia con el medio ambiente y con el bienestar de las personas. 

Tenemos que apostar por la voluntad del mundo de incorporar hábitos a la vida diaria que mejoren fundamentalmente la educación ambiental. Cambiar quizás el concepto de belleza pues la emoción, el asombro, etc..se asemeja a cuando ves algo bello. Algo bueno puede cambiar el mundo.

Para finalizar os dejo un poema de Lorca 

Federico García Lorca

Canción primaveral

I 
Salen los niños alegres 
De la escuela, 
Poniendo en el aire tibio 
Del abril, canciones tiernas. 
¡Que alegría tiene el hondo 
Silencio de la calleja! 
Un silencio hecho pedazos 
por risas de plata nueva. 

II 

Voy camino de la tarde 
Entre flores de la huerta, 
Dejando sobre el camino 
El agua de mi tristeza. 
En el monte solitario 
Un cementerio de aldea 
Parece un campo sembrado 
Con granos de calaveras. 
Y han florecido cipreses 
Como gigantes cabezas 
Que con órbitas vacías 
Y verdosas cabelleras 
Pensativos y dolientes 
El horizonte contemplan. 

¡Abril divino, que vienes 
Cargado de sol y esencias 
Llena con nidos de oro 
Las floridas calaveras!