Los renglones torcidos de Dios

Los renglones torcidos de Dios es una novela publicada en 1979 por Torcuato Luca de Tena. En ella se relata la historia de Alice Gould.  En este libro  se aborda la enfermedad mental como tema básico.  Os dejo unas ideas y reflexiones acerca de la temática que a mí me han parecido interesantes.

"Los renglones torcidos de Dios son, en verdad, muy torcidos” y  puede ser que “La verdadera locura quizás no sea otra cosa que la sabiduría misma que cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligencia resolución de volverse loca”. Enrique Heine.

Ø  Las obras maestras como D. Quijote y el licenciado vidriera podrían ser historias clínicas reales.

Ø  Profundiza en el mundo interno del enfermo. El mundo del enfermo mental es coherente consigo mismo. Sus actos absurdos para el espectador, siguen unas leyes que éste desconoce pero no son arbitrarios. Los patrones de conducta encajan como piezas de un mosaico.

Ø  No tener una mano amiga ni un punto de apoyo

Ø  Vivir una situación auténtica con todos sus riesgos y posibilidades

Ø  La triste realidad con un carácter terrorífico.

Ø  Fragante contradicción el tener respuesta para todo, y el encontrar una explicación de porqué se vio obligada.

Ø  Se aprovecha de mis ideas, de lo que yo digo y hago.

Ø  Mi padre poseía un gran talento. Era un hombre excepcional. Nos queríamos y nos apreciábamos. La diferencia entre estos dos sentimientos está que el primero indica amor y el segundo estimación intelectual. Es decir, admiración y orgullo recíprocos.

Ø  Creerse lo que no era.

Ø  Nunca confesaré estar enferma sino legalmente secuestrada.

Ø  La consideró doblemente peligrosa. Por su enfermedad y por su inteligencia.

Ø  Los locos son como niños no puede convencérseles con razones porque al carecer de razón son incapaces de razonar.

Ø  Todos poseen una tecla que si se la roza desencadena una crisis.

Ø  Hay varias cosas en usted que molestará a muchos o provocará malestar y que considerará incluso como una provocación: Su vestido, su broche, su bolso y sus zapatos.

Ø  Ella estaba allí en misión profesional, con el propósito específico de investigar.

Ø  Si alguna vez la descubrían hurgando, preguntando o anotando, atribuirían esa actitud a us delirios, sin pensar que real y verdaderamente estuviese haciendo averiguaciones para esclarecer su tema. Lo que más le angustiaba era el escenario siniestro en el que había que representar su farsa.

Ø  Ella era incapaz de soportar la visión del dolor humano. No era valiente en presencia del sufrimiento ajeno. A partir de ahora, tendría que moverse entre multitud de seres cuyas úlceras no estaban en la piel o en las entrañas sino en la mente. Individuos llagados en el espíritu tarados del alma.

  De todas sus investigaciones ésta era la más ingrata, en detritus de humanidad.

Ø  Ya no le era posible huir de aquella casa de locos. La suerte estaba echada.

Ø  Estas aquí voluntariamente. Nadie te ha obligado a venir, no lo olvides. Has cobrado una fuerte suma por ello. Pecha ahora con las consecuencias y se valiente.

Ø  Ardo en deseos de saber cuál es la misión. Funciones de personas que no actuaban con acierto. Una de esas funciones son ayudar, informar de las costumbres, aconsejar.

Ø  Ella contaba entre sus armas con un buen gusto para vestir, poder de seducción. La batalla había empezado y la separaron de su armadura. Su osadía ya no era la misma y se sintió desprotegida y desmoralizada.

Ø  ¿Y cuál es mi estrategia? Cuando veo la del otro retirarme.

Ø  Su dolencia no afectaba a su físico sino a las entrañas de su espíritu llagado por un recuerdo infamante e incognito.

Ø  Creí entenderlos por sus posturas incógnitas, sus nerviosas cortesías. ¿Qué había detrás de aquellas frentes? Variedad de dolencias, congeladas o en evolución. Dejaban traslucir diferentes miradas, posturas y actitudes.

Ø  Conocer su consciente: como es, lo que le gusta, qué sabe de si misma, cómo desearía ser. Esto se lograría charlando con sinceridad.. Luego quiero conocer que ignora de sí misma, su subconsciente y hacerlo aflorar al plano consciente. Quiero que me cuente lo que sabe y lo que no sabe.

Ø  Hirió mi sensibilidad infantil con los secretos: No digas, no hagas, no confies, etc..

Ø  El modelo de ser digna, bondadosa, fuerte. Me lo exigía a mí, ese grado de perfección que no veía en otros.

Ø  Freud era un sabio que descubrió uno de los métodos más eficaces para hacer aflorar al consciente, secretos morbosos, escondidos en nuestro interior, perdidos en la memoria, como un niño abandonado en el bosque… que sabe que existe un camino para su salvación, pero que no lo encuentra. Su error estriba en la dirección unilateral que dio a sus interpretaciones. No sólo somos sexo. Era un obseso, cabeza cuadrada que siempre quiere aplicar la geometría al alma humana. Tiende a simplificar lo que es tan variado, tan complejo, tan interesante, tan grande como el espíritu.

Ø  Tenía ideas apasionadas, inteligentes y apoyadas en secretos sanos y lúcidos. Le agradaba el silencio y la soledad

Ø  Admiraba las siguientes cualidades: Abnegación, delicadeza, intuición y buen gusto. La belleza por supuesto que también pero cuando su exterior es como un reflejo de su interioridad.

Ø  El hombre es el único animal que se crea necesidades que nada tienen que ver con la subsistencia del individuo y con la reproducción de la especie. No le basta comer para alimentarse sino que condimenta los alimentos, de modo que añade placer a la satisfacción de su necesidad. No le basta vestirse para abrigarse sino que añade a esta función tan elemental la exigencia de confeccionar su ropa con determinadas formas y colores. No se contenta con cobijarse sino que construye edificios con líneas armoniosas y caprichosas que exceden de su necesidad. Lo cual no ocurre con la guarida del zorro, la madriguera del conejo o el nido de la cigüeña. Ahora bien todo esto que está añadido a la pura necesidad ES ARTE. La gastronomía, la alta costura y la decoración son las primeras artes creadas por nuestra especie. Representan los excesos inútiles añadidos a las necesidades primarias de comer, abrigarse y guarecerse.

Ø  En el momento en que el espíritu creador del hombre se despegó incluso de la necesidad primaria para producir sus lucubraciones nacieron las grandes artes: Poesía, danza, Música, Pintura. La danza se aleja del arte, es como una necesidad, es una mímica sublimada, tal vez sea anterior al lenguaje, y tuviera en sus orígenes una intencionalidad práctica: Una carga erótica, reverencial o religiosa. No sé que intencionalidad tenía pero seguro que encerraba un propósito encaminado a la consecución de un fin.

Ø  La intencionalidad es algo muy superior a la necesidad primaria relacionada directamente con el juicio y la voluntad. Quiero esto y voy a demostrarlo con gestos y ademanes rítmicos y la humanidad se puso a danzar.

Ø  Un poema de Lorca de arte puro es el siguiente:

  Mi corazón como una sierpe,

se ha desprendido de su piel

   Y aquí la miro entre mis dedos

Llena de heridas y de miel”

Ø  La gente entiende por debilidades humanas lo que son debilidades animales. Lo humano es lo que supera a lo animal.. Lo que está por encima de lo que hay de nosotros de fieras.

Ø  No habla porque no le da la gana.

Ø  No es que me haya enfadado  con usted sino con el hecho de que sea tan perfecta, una mujer admirable, digna de admiración y con una personalidad cautivadora, “no es usual ver a los ángeles en el infierno”.

Ø  Mirada de amor, hechizada y cautivadora, obediente al impulso ajeno, con tendencia a imitar los movimientos ajenos, 
 Sus pensamientos se volvían confusos.
No era capaz de fijar sus ideas.
De niña cuando la seguían y la tiraban de la falda .... cuando ya rozaba el objeto anhelado un estúpido competidor tiraba con fuerza de sus piernas.
Un oscuro sentimiento la impedía alcanzar la meta de su sentimiento.
Lanzaba con lucidez y fuerza su argumento hacía el frente y este regresaba como la pelota rebotaba en un frontón.
Al comprobar la radical imposibilidad de su empeño llegó a imaginar que en los vasos que tomó en la junta habían infiltrado una droga, un hechizo, un bebedizo cuya única misión era bloquear una parte de su personalidad, taponar una zona de su memoria, inmovilizar un resorte de su pensamiento.