Para los maestros de ahora nuestro
trabajo es una profesión. Y como profesionales que somos tenemos un horario y
un sueldo. Ganamos más que algunos pero menos que muchos. Y muchos trabajadores
tienen vacaciones diferentes a las nuestras y más tiempo. Otros están en paro,
otros tienen mucho dinero y no trabajan y así es la vida.
Quiénes nos piden que trabajemos más lo
hacen desde el desconocimiento de nuestra profesión. Muchas horas en el centro y muchas, quizás
más de trabajo, formación y preparación de las clases fuera del mismo.
Somos funcionarios pero a muchos nos
costó esfuerzos extras y fuerza de
voluntad el conseguir unas oposiciones,
sin horas de dormir, ni descanso y con estrés.
No nos podemos comparar con otros
profesionales. Nuestro trabajo, parece fácil pero es complicado y difícil, duro
y arduo, hoy sobre todo dónde se desconoce la realidad de los centros.
El número de alumnos de antes era
diferente porque se trataba de una disciplina pura y dura sin libertad de
expresión que hoy nadie quiere para sus hijos. Es mucho más duro y difícil hoy
con menos alumnos que en tiempos pasados con tantos y además cuando hay tantos expertos
que no son maestros y se creen con un saber superior.
Si un alumno falta a clase hoy en día
pierde el programa y el maestro parece que tiene que dedicar un tiempo extra
que no tiene para recuperarlo. Se exige calidad y excelencia.
En un estado de bienestar no es que
conviene recordar tiempos pasados sino que tenemos que mejorar y
dignificar los presentes.
El apoyo está en ayudar a mejorar la
calidad de la educación y la excelencia del alumnado, a permitir al profesorado
trabajar en las aulas con dignidad y con
tiempo de estudio, planificación de sesiones, preparación de materias, recursos tanto de aula como de
centro o pedagógicos y corrección de los mismos. Y entre otras cosas a
posibilitar la adaptación de los currículos a la diversidad cultural y a las
competencias que se tienen que aplicar en una sociedad del 2012.
Hablemos del maestro de hoy, de lo que
se hace y se tiene que hacer hoy, arreglemos el presente para construir el
futuro en sociedades tecnológicamente avanzadas.
Dignidad por nuestro trabajo, ya es
hora.
Os dejo un vídeo que encontré en youtube y que me gustó sobre la pasión de aprender
1 comentario:
Qué gran verdad tu texto Maite
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